domingo, 4 de agosto de 2013

A los hombres se les conquista por la vista y a las mujeres por el oido

Una vez, hace muchos años oí en un café a unas señoras de cierta edad comentar entre risas  que "a las mujeres se nos conquista por el oído mientras que a los hombres se les conquista por la vista"
 
 Es interesante pensar como diferentes sentidos participan en la seducción pero influyendo de distinta manera dependiendo del genero a conquistar.
 
Las mujeres debemos preocuparnos por nuestra apariencia física, para entrar en el flirteo con éxito.
 
"No te preocupes de sacar tus títulos universitarios ni hablar de doctorados porque el solo mirara la talla de tu sujetador y el volumen de tu culo. No le importara  tanto tu valía profesional como que haya detrás un cuerpo seductor y una cara atractiva". comenta Amparo Izquierdo, relaciones publicas de una conocida sala de fiestas.
 
 
 
Ritual de seducción de un hombre
 
 
¿Y que pasa con los señores, tienen que exhibir su cuerpo atlético y su ropas de diseño para llamar nuestra atención? Después de analizar 300  encuestas de mujeres de 25 a 45 años de distintas profesiones, la psicóloga  llegaba  a la conclusión  de que seria recomendable que los hombres no pasaran tanto tiempo haciendo musculitos en el gimnasio y que se pasen mas por las bibliotecas para  cultivar  su mente si lo que realmente buscan  es una relación estable,  conclusiones aportadas por Emilia Ruiz doctora en Psicología por la Universidad complutense.
 
Como  en todas las normas generales hay excepciones. En un análisis general a primera vista muchas mujeres  se fijaban en conjunto en todo pero se quedaban  principalmente con lo que le decían y con la manera de expresarse.
 
Aplicado a mi historia personal me he dado cuenta que a mi me ha ocurrido siempre lo mismo, "siempre  me dejo llevar por los contenidos,  de ahí que a veces incluso he perdido los detalles del rostro de la persona por la que me he sentido atraída, Si cierro los ojos podría incluso relatar las conversaciones aunque no recuerde su cara"
 
De ahí que sea mucho mas frustrante para una mujer encontrar un buen comunicador. "Que nos escuchen, que se comuniquen abiertamente y que nos tengan en cuenta, nos da vida y de igual manera cuando acaba la comunicación nos la quitan de un plumazo" comenta Ana López, publicista.
 
 "Podemos revivir en nuestra mente  una y mil veces los estímulos que nos ha provocado una conversación, los mensajes que nos hemos enviado, los emails que se han cruzado en nuestro ordenador aunque no nos acordemos de sus arrugas"
 
Cuando hay bases solidas mas allá de una simple buena apariencia, el duelo es mas duro de llevar.
 
Muchas veces hemos visto parejas en las que la mujer era joven y el señor bastante mas mayor, con una diferencia de años considerable.
 
La primera idea que se nos puede pasar por la cabeza, "esta ira por su dinero", pero cuando analizas el caso y las finanzas de cada uno  y te das cuenta que incluso es la mujer mas acaudalada que el caballero, entonces te hace  pensar y  tal vez  cobra mas fuerza que nunca  lo que las señoras comentaban en el café  que a los mujeres se nos conquista por el oído.
 
 

miércoles, 31 de julio de 2013

Confidencias de una camarera


Me llamo Aurora , soy madrileña y estoy haciendo un máster en psicología social. Analizamos comportamientos y percepciones que nos ayudan a entender mejor a la gente.
Este año como todos sabéis,  las becas las han reducido y en consecuencia mi presupuesto .  Hace unos meses que he  empezado a trabajar por las tardes en la cafetería de la estación para pagarme los estudios.
La cafetería esta bien ubicada, tienen muchos clientes, viajeros que van y vienen, y residentes de la zona que pasan por ahí o que utilizan el tren de cercanías para ir al trabajo.
"Estoy con este trabajo poniendo en practica los conocimientos que he aprendido en la universidad aunque sea detrás de la barra"
Para serles honesta, les diré que falsifique mi currículo para que me dieran el puesto. No tengo ninguna experiencia como camarera pero me esmero cada día  atendiendo a la gente, soy  rápida, agradable y siempre sonrío.
Cuando limpio las mesas y preparo la barra, me gusta observar a los clientes e imaginarme sus vidas. Inmediatamente y de forma inconsciente comienzo a  analizar sus comportamientos.

Una tarde, creo que era jueves, había algo de revuelo en el café porque se jugaba  por la noche un partido de futbol . Vi  llegar a un caballero, me llamo la atención porque iba impecable,  llevaba sombrero a juego con la bufanda y parecía  muy elegante. Me pidió un café con educación y  una sonrisa,  mientras le servía comenzó a leer un libro, me pareció una novela de García Márquez.


Al rato llego una señora y se sentó con él,  me acerque rápidamente a la señora para preguntarle si le apetecía tomar algo. Presumí que era su esposa por su edad y la confianza entre ellos. Conversaban como cualquier pareja. Estuvieron un par de horas y se fueron.
Unas dos o tres semanas después, le volví a ver acompañado con otra señora, sus risas y su complicidad me hicieron pensar que esta también podría ser su mujer o que hubiera una relación entre ellos. Llevaban libros y parecían comentar a los autores. Esa tarde había muchas mesas que atender así que no les pude observar por mucho tiempo.
No le di mucha importancia al asunto, ni más rienda a mi imaginación y lo olvide.
A la semana siguiente,  el caballero vino de nuevo con otra mujer, mi compañero les atendió mientras yo limpiaba  las mesas que habían al lado.
Esta vez no pude dejar de fijarme en la mujer, parecía estar radiante, tenía una luz especial en su mirada, era mas joven que las anteriores y parecía enamorada,  ambos  reían y compartían miradas, gestos y confidencias. 
De nuevo volví a apreciar en el caballero la misma complicidad que había visto con las otras dos mujeres anteriores.
Empecé a limpiar la cristalera que  estaba cerca de la mesa que ellos ocupaban, me dedique a observarlos con detención, aunque con disimulo, eso sí, les vi que se rozaban como novios y de vez en cuando se cogían las manos.
Esta vez en esa mesa no se compartían palabras como con la primera mujer, ni libros como con la segunda, con esta tercera   se compartían miradas, gestos y silencios.

No pude evitar sentir un escalofrió  por dentro. En un primer momento me hubiera gustado haber sido valiente y haber ido y hablado con la mujer durante unos minutos.
Pero después de unos segundos de reflexión, me di cuenta que  ya era tarde y que nadie podría inmunizarla de los efectos  de Cupido, sus flechas ya estaban clavadas.
Así que no podría  hacer nada para evitar que su corazón se rompiera en pedazos.
"Un día ella sola descubriría  que hay hombres que no saben decir que no y que son caballeros porque nunca cuentan nada de las otras"

¿Crees que hizo bien la camarera o debería haber hablado con la señora?

miércoles, 3 de abril de 2013

Del profesional que echo raices al traseúnte sin territorio

Llevo  muchos años corriendo, de un sitio a otro, de un proyecto al siguiente y así toda una vida.
¿Os ha pasado a vosotros también durante algún periodo de vuestra vida?

Algunos amigos, fueron por un solo camino y hace años que llegaron al destino y echaron raíces, ellos y la sociedad pensábamos que era una cualidad lo estable y perdurable.



Hay muchos caminos por recorrer



Lo que ninguno sabíamos es que íbamos a sufrir un terremoto social y económico que arrastraría las estructuras solidas y conservadoras y que todo se convertirían en liquido.

Lo estable pasaría a ser inestable, lo valido dejaría de serlo y el cambio y la capacidad para adaptarse lo antes posible empezaba a premiarse.

El transeúnte que iba con su mochila de conocimientos de un sitio a otro de un proyecto al siguiente se abría paso ante el profesional que llevaba décadas en la misma empresa y que se había perdido siempre siguiendo el mismo camino.




Llena la cesta de tu vida con lo que te guste

Ha llegado un momento donde la palabra reinventarse tiene mas fuerza que nunca.
Analicémonos, estudiemos nuestras capacidades y nuestras fortalezas y pongámoslas en valor.

Si la sociedad demanda este tipo de profesional ahora adaptémonos  a los cambios del mercado y dejemos de dar vueltas al mismo circulo, cuando tenemos todo un mundo por recorrer.

Si crees que tienes habilidades y retos que te gustaría conseguir, échalos en la cesta de tu vida  y  por extraños que te parezcan cuéntanoslos. Vamos a empezar un taller de creatividad, puede ser que tu hobby se convierta en tu profesión y sea la que te pague la facturas y encima disfrutes trabajando.
¿No está mal no?

Envíanos un email diciendo en lo que eres bueno y no encuentras trabajo :

informaycomunica@gmail.com


Esperamos tus emails.
El transeúnte del conocimiento